Este centro actualmente es operado por el STRI y cuenta con alojamiento, laboratorio, invernadero, Internet de fibra óptica dedicada y un vehículo disponible para trabajo de campo.
Las investigaciones en la Reserva Forestal Fortuna iniciaron a mediados de la década del 70 como respuesta a la necesidad de mayor conocimiento y entendimiento sobre los posibles impactos de la construcción de la represa Edwin Fábrega en la cuenca alta del río Chiriquí.
Este centro fue instalado en enero de 1989 por el Departamento de Manejo de Cuencas Hidrográficas el extinto Instituto de Recursos Hidráulicos y Electrificación, empresa estatal que hasta el año 1998 estuvo a cargo de la prestación de los servicios eléctricos en Panamá y fue bautizado en memoria de Jorge L. Araúz, quien falleció durante la construcción de la hidroeléctrica Fortuna.